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10/02/2012

La FeSP rechaza la reforma laboral porque es injusta y no creará empleo

Madrid,10 de febrero de 2012. (Comunicado de la Junta Ejecutiva Federal de la FeSP).

La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) expresa su rotundo rechazo a la reforma del mercado laboral que ha aprobado hoy el Gobierno, porque no va a servir para crear empleo, abarata el despido, recorta derechos de los trabajadores en beneficio de los empresarios y, además, es injusta porque hace recaer la crisis sobre los más débiles mientras protege a quienes la han provocado. El propio Mariano Rajoy ha reconocido que este año no se creará empleo.

Una de las medidas más graves de las acordadas es la de autorizar los despidos colectivos (los ERE) sin necesidad de que previamente los apruebe la autoridad laboral. Esto supone, lisa y llanamente, que cualquier empresario podrá despedir a parte de su plantilla cuando tenga pérdidas o disminuyan sus ingresos durante nueve meses.

En los medios de comunicación, donde se han perdido más de 5.000 puestos de trabajo en los tres últimos años, esta reforma solo va a servir para que los empresarios puedan despedir con un coste menor. La supuesta intención de contratar a jóvenes va a ser utilizada por muchos de ellos para incrementar todavía más la ya alarmante precariedad que se vive en este sector. Esto repercutirá negativamente en el trabajo de los periodistas y, en consecuencia, también afectará al derecho fundamental a la información que tiene la ciudadanía.

La Junta Ejecutiva Federal de la FeSP –en una primera evaluación, a la espera de conocer las medidas en su integridad– considera que esta reforma perjudica a todos los trabajadores en general, y a los periodistas de manera especial porque esta profesión no está regulada legalmente. Esta falta de regulación supone en la práctica que muchos informadores han sido despedidos sin indemnización y sin seguro de desempleo o han visto recortados sus salarios unilateralmente por su empresa sin tener los mismos derechos que el resto de los trabajadores.

La FeSP responsabiliza de esta situación al PSOE y al PP, porque no han querido regular por ley esta profesión para no enfrentarse a los grandes grupos de comunicación.

La reforma aprobada hoy generaliza el despido improcedente con 33 días de indemnización por cada año trabajado y un tope máximo de 24 mensualidades –en vez de los actuales 45 días actuales hasta 42 meses–, permite que las empresas no apliquen el convenio colectivo de su sector cuando atraviesen por dificultades económicas y acuerda que las empresas de trabajo temporal (ETT) puedan actuar como agencias de colocación, en vez de potenciar el Servicio Público de Empleo (el antiguo Inem) para que cumpla esa función.

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