Canal Sur, condenada por tener corresponsales en Madrid como falsos autónomos

Tres periodistas, que encadenaban contratos de servicios desde hace 18, 16 y 6 años, deben ser de plantilla como indefinidos no fijos. Otra redactora está pendiente de que se vea su demanda

Canal Sur logo Twitter
La empresa pública Canal Sur Radio y Televisión ha sido condenada a contratar en su plantilla como trabajadores indefinidos no fijos, con jornada completa, a tres periodistas de su delegación en Madrid que estaban como falsos autónomos. Llevaban 18, 16 y seis años encadenando contratos de prestación de servicios, y aún está pendiente la demanda de otra redactora que lleva bastantes años en la misma situación.
La redactora Carmen del Arco trabaja en exclusiva para Canal Sur Radio desde hace 16 años, Las crónicas que le piden las envía desde las cabinas que esa emisora tiene a su disposición en el Congreso, Senado, Moncloa, sedes de PSOE y PP o desde la delegación de Canal Sur en Madrid. Los primeros años trabajó sin contrato y facturaba cada mes a un precio por crónica pactado, pero después ha encadenado 20 contratos sucesivos de prestación de servicios de uno, dos, tres o seis meses de duración.
En esa misma situación trabaja la redactora Isabel García, que desde mayo de 2013 ha encadenado 18 contratos de duración similar a los ya citados. También ha presentado una demanda otra redactora Gema Vélez, pero aún no se fijado fecha para el juicio.
En dos sentencias distintas pero con idénticos fundamentos de derecho, la titular del Juzgado de lo Social número 4 de Madrid, María Luisa Sanz Anchuela, indica que en ambos casos de cumplen todas las condiciones que exige la ley para considerar que existe una relación laboral entre las dos redactoras y Canal Sur, y no una prestación de servicios externa como figura en los numerosos contratos que han tenido que firmar durante tantos años: trabajan a las órdenes de la empresa y dentro de su estructura, organizan sus vacaciones o días libres coordinándose con los demás trabajadores, la empresa les facilita un teléfono móvil corporativo y el material técnico necesario para enviar las crónicas…
«Considera esta juzgadora que la trabajadora sí estaba bajo el ámbito de la dirección y organización de la empresa, pues tampoco es que hiciese los reportajes y luego los cediera a la demandada o ésta le encargara unos trabajos concretos, como a un ‘freelance’, sino que la tenía encargada de determinadas coberturas, indicándole cuándo iban a tener lugar los actos que ella debía trabajar», indica la magistrada en cada una de las dos sentencias.
Al ser Canal Sur una empresa pública la juez no puede declarar que estas redactoras deben ingresar en la plantilla como personal fijo, porque la contratación irregular por parte de la Administración «no puede suponer una puerta de acceso a la consolidación como trabajador fijo», según reiterada jurisprudencia, pues entonces esos trabajadores serían fijos en una empresa pública sin haber pasado las pruebas de acceso que se han exigido a los demás.
La juez ha estimado las dos demandas, declara que existe una relación laboral indefinida no fija con Canal Sur Radio y Televisión, con la categoría de redactoras y jornada completa, y condena a la empresa a abonarles las cantidades que corresponden en cada caso.
En otra sentencia, el titular del Juzgado de lo Social número 26 de Madrid ha estimado la demanda del periodista Jerónimo Alonso, que trabaja para Canal Sur Radio y Televisión en la delegación de Madrid como falso autónomo desde hace 18 años. Desde entonces ha encadenado numerosos contratos y se ha dedicado a cubrir la información deportiva y a retransmitir partidos. El juez, con argumentos similares a los de la otra magistrada, también declara que existe una relación laboral de carácter indefinido no fijo, con la categoría de redactor y jornada completa.
Los jueces remitirán estas sentencias a la Agencia Tributaria y a la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social, para que analicen las repercusiones fiscales y de Seguridad Social que puedan tener para Canal Sur, por haber estado tantos años sin tributar por esos trabajadores.
La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) -a la que pertenece el Sindicato de Periodistas de Madrid (SPM)- ha pedido en reiteradas ocasiones que el Gobierno refuerce la Inspección de Trabajo, para que sea más eficaz la lucha contra los numerosos casos de falsos autónomos que trabajan en exclusiva en empresas de comunicación de manera irregular y deben ser de plantilla.