Pulsa fuera para salir.

08/07/2005

Luchar contra toda precariedad

Madrid, 8 de julio de 2005 (hoja informativa del SPM-RNE)

En RTVE hace mucho que entró la precariedad laboral, profesional y económica. La última (¿la última?) ha llegado de la mano del contrato con el grupo Mediapro para realizar un programa de actualidad y, en consecuencia, informativo aunque no tenga formato de telediario. La misma dirección de RTVE que ha firmado el contrato ha asegurado en la semana del estreno de España Directo que resulta más barato hacerlo con una mayoría de trabajadores de fuera de la empresa. Además de constatar que los compañeros trabajan en peores condiciones que nosotros, la afirmación es una gran tontería o mentira porque el gasto en la plantilla se realiza igualmente. Pero el nivel no mejora si subimos en el escalafón directivo. La Directora General, Carmen Caffarel, ha asegurado esta misma semana en los Cursos de Verano de El Escorial que la plantilla está magnificada, palabra rebuscada y equívoca que significa tanto alabada como engrandecida. Desafortunadamente no se trataba de echarnos flores y sí de una grave contradicción porque o somos muchos y no hay necesidad de contratar fuera o si hay que contratar es porque no cubrimos las necesidades.

Hace tiempo que venimos afirmando que en RTVE faltan profesionales y que ya no llegamos a muchas informaciones o llegamos de mala manera porque las emisiones se han multiplicado y la plantilla ha decrecido. Y también hemos dicho que el modelo es la especialización y no el de portamicrófonos a destajo que se utiliza crecientemente en las privadas.

Hemos denunciado reiteradamente que en los centros territoriales la precariedad es insoportable y que en algunos se trabaja en condiciones miserables. No se ha hecho nada. La radiotelevisión pública estatal tiene la obligación legal, vigente, de asegurar presencia y cobertura en todo el Estado. No se está haciendo.
Pero también hemos denunciado otras precariedades, de estudiantes que practican con trabajo real, de contratados que trabajan como nosotros, a nuestro lado, cobrando un 40% o un 30% menos y con exigencias rigurosas que no se reclaman a los fijos, de los excluidos de convenio, autodenominados plantilla esclava paralela.

Para empeorar las cosas con un futuro más lamentable, hay una reforma firmada pero no ratificada por la autoridad competente que ahondaría las diferencias entre fijos y profesionales de nuevo ingreso en RTVE que hemos rechazado y seguimos rechazando. Los que han firmado esto no han dudado en hacerse un hueco entre quienes denuncian el caso Mediapro.

El SPM y los demás sindicatos integrados en la Federación de Sindicatos de Periodistas hace más de 10 años que venimos denunciando la precariedad creciente en los medios de comunicación privados y públicos y la estamos haciendo llegar, entre la indiferencia de asociaciones de prensa que no de sus trabajadores y la incoherencia de otras organizaciones, a foros, a partidos, a grupos parlamentarios y a organismos consultivos del gobierno.

Por supuesto que estamos contra la precariedad en Mediapro, un grupo de 30 empresas con 1.100 trabajadores que facturó en 2004 por valor de 195 millones de euros y que tiene un equipo directivo plagado de profesionales formados en las públicas (la mayoría en TV3 pero también en RTVA, Telemadrid, TVE y RNE), en privadas progres y en otras de signo contrario y hasta en los gobiernos de José Bono en Castilla La Mancha. Por supuesto que estamos contra su utilización por RTVE y, por supuesto, también contra la precariedad firmada desde dentro.

NOTA: el comité de empresa de TVE ha aprobado una resolución unánime en la que solicita la suspensión del programa España Directo hasta que sea acordada con la representación sindical una salida negociada al conflicto. Junto a los comités de empresa de RNE y del ENTE PÚBLICO RTVE, se califica como inaceptable la puesta en marcha del programa por ser un grave riesgo para el empleo en RTVE y especialmente en sus Centros Territoriales. Los tres comités entienden que estos programas deben realizarse como producción propia.

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